La ascensión a montañas es una actividad que debe realizarse teniendo en cuenta una serie de parámetros y recomendaciones clave. Esto se debe, a que además de ser una experiencia única para disfrutar de la aventura y la emoción de una vivencia nueva, también es una disciplina deportiva que debe ser tratada con compromiso.
En Tolhuin Expeditions nos interesa que todas tus experiencias con nosotros sean gratas y representen un triunfo personal. Por eso, hoy queremos compartir cuáles son las recomendaciones, escenarios y actividades de condicionamiento que debes tener en cuenta a la hora de hacer montañismo.
¿Cómo podría afectarte la altura?
El aire de la atmósfera se compone de 20,9 % de oxígeno. Este porcentaje, se mantiene de forma constante y solo presenta variaciones cuando se sale de la troposfera (la capa que recubre la atmósfera terrestre). Sin embargo, cuando una persona está realizando alguna actividad de ascenso, conforme aumenta la altitud, disminuye la presión atmosférica. Debido a este fenómeno, el cuerpo humano experimenta la disminución de la presión parcial de oxígeno en el aire inspirado y puede sufrir de mal de montaña, más conocido como mal de altura.
En pocas palabras, este fenómeno se entiende como el malestar físico que se siente cuando una persona presenta dificultad para adaptarse a la baja presión del oxígeno, debido a la gran altitud.
Si bien todas las personas pueden presentar diferentes reacciones, los síntomas del mal de altura más comunes son:
- Dolores de cabeza: es el síntoma más frecuente del mal de altura. Suele sentirse en diferentes zonas de la cabeza y puede agudizarse dependiendo de las condiciones atmosféricas.
- Somnolencia y periodos de apnea: es usual que las personas experimenten trastornos relacionados al sueño, debido a la hiperventilación que se genera como respuesta al mal de montaña.
- Náuseas y vómitos.
- Excesivo agotamiento.
Aunque la mayoría de las veces los síntomas son leves, también pueden causar incomodidad, alterar la actividad debido al malestar o ser incapacitantes. Del mismo modo, suelen ser progresivos, aparecen entre las 2 y 12 horas tras la llegada a una nueva altitud y pueden acrecentar después de la primera noche de sueño.
¿Qué se puede hacer para prevenir el mal de altura?
Inicialmente, es recomendable que haya una buena preparación antes de la expedición. El buen acondicionamiento físico, los cuidados a la salud y la aclimatación son aspectos esenciales para prevenir esta condición. También se recomienda mantener una dieta variada y balanceada, seguir las recomendaciones para una hidratación adecuada, evitar el consumo de sustancias alcohólicas o psicoactivas y al menos 8 horas de sueño el día anterior a la actividad planeada.
Por otro lado, se recomienda que en caso de sufrir de alguna condición de salud, el alpinista acuda con un profesional y avise a sus guías, acompañantes o grupo cuáles son sus afecciones, antecedentes, qué medicamentos consume y sea muy cuidadoso al momento de seguir las instrucciones que permitirán un ascenso exitoso.
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¿Cómo prepararse para hacer senderismo en altitud?
Teniendo en cuenta todo lo anterior, las personas que quieren iniciar su aventura deben tener presente que esta es una actividad que conlleva mucho esfuerzo. Por lo tanto, es importante que tengan presente una serie de implementos y recomendaciones que serán esenciales a la hora de prepararse.
1. Elegir el lugar a donde se quiere ir: es importante decidir asertivamente el lugar en el que se va a realizar la actividad y sentir interés por lo que ofrece en términos de aventura. Por ello, es fundamental hacerse preguntas como: ¿Qué es lo que más me interesa? ¿Siento interés por las grandes alturas? ¿Quiero emprender mi viaje a lados desérticos o húmedos?
Con la ayuda de estas preguntas, tomar una buena decisión y disfrutar incluso de los momentos más difíciles del ascenso, puede resultar una tarea mucho más sencilla.
2. Distancia: cuando ya esté claro el destino, el alpinista debe medir la distancia a la que quiere ir e investigar sobre el terreno, las condiciones de ascenso, entre otras cosas. Esto resulta muy efectivo a la hora de calcular bien el tiempo de caminata y para trazar objetivos y metas objetivas.
3. Tiempo: Para el senderismo, escalada de alturas o trekking hay tiempos estimados de viaje; por ejemplo, una persona excursionista puede durar un periodo aproximado de entre 1 a 6 días. Debido a que todo depende del lugar a donde se vaya a ir, la decisión implica que se tomen en cuenta todas las variables posibles y se escojan las condiciones más favorables.
4. No confundir los términos: muchos no saben la diferencia que existe entre trekking, senderismo, ni expedición. Lo cierto es que si bien tienen aspectos en común, no son iguales. El trekking se refiere a un itinerario que transcurre por caminos y collados a gran altitud, la expedición es el ascenso a una montaña sin importar su dificultad, y el senderismo se desarrolla por senderos y rutas fijas.
5. ¿Trayectoria pesada o ligera?: dependiendo del tiempo, los gustos y el tipo de viajero, este es un aspecto esencial, ya que de ello depende el tipo de preparación física y mental que se debe realizar previa al viaje.
6. ¿Qué comida empacar?: este es uno de los factores más importantes, ya que la alimentación en este tipo de viajes es fundamental para conservar altos niveles de energía y de oxigenación. Entre los alimentos que se recomienda llevar están:
- Latas de legumbres
- Frutas secas
- Frutas deshidratadas
- Cereales
- Barras energéticas
- Jugos frutales
- Arroz
- Pan
- Agua
7. ¿Qué integrar en tu mochila de viaje?: como ya se mencionó, el agua es el primer elemento que todo aventurero debe tener, sin embargo, hay otras cosas que no pueden pasarse por alto y deben incluirse en la mochila de viaje, estas son:
- Una tienda de camping lo suficientemente grande.
- Saco para dormir muy ligero, pero que caliente en caso de que la excursión. sea en algún lugar de clima frío.
- Un colchón inflable.
- Una estufa eléctrica para cocinar los alimentos, con carga completa.
- Zapatos lo suficientemente cómodos para caminar.
- Caja de herramientas.
- Cuerda.
- Casco de protección y gorra de expedición.
- Muda de ropa.
- Chaqueta.
- Comida en buenas proporciones.
- Celular indudablemente y su cargador.
- Una brújula.
- Un mapa zonal.
- Botiquín.
- Elementos prácticos como navaja, sábanas y gafas de sol, lo que se considere necesario para tener el mejor viaje en las alturas.
¿Cuáles son los efectos secundarios de la altitud?
En caso de no tomar las correctas precauciones, algunos alpinistas pueden quedar con síntomas luego de haber escalado de volcanes o montañas. En algunos casos, luego de haber tenido una expedición en las alturas, se suelen presentar afecciones pulmonares, insomnio, jaquecas, problemas de asma, hipertensión arterial e incluso se puede desarrollar mal de montaña crónico.
Si bien estas son afecciones que pueden tratarse clínicamente, se recomienda mucha responsabilidad por parte del montañista y seguir todas las recomendaciones e instrucciones dadas por especialistas (tanto médicos, como montañistas capacitados). Teniendo en cuenta lo que hemos compartido hasta aquí, ya sabes lo que debes hacer cuando decidas iniciar tu gran aventura. Solo es cuestión de que sigas estos consejos para que estés completamente preparado y tengas el respaldo que necesitas.
Ahora, tienes que saber que existen distintas actividades, como el senderismo en los Alpes, que puedes realizar sin exponerte. Aquí encontrarás personas aficionadas al alpinismo, disfrutarás de paisajes maravillosos y te podrás relacionar con aventureros principiantes.
En Tolhuin Expeditions queremos que hagas parte de un mundo más aventurero, donde además puedas cuidar y vivir de forma responsable todo lo que te ofrece la naturaleza y el medio ambiente. ¡Anímate y disfruta del turismo de aventura en Chile!
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