En La Paz dos montañas atraen la mirada: el Illimani al SE y la pirámide de hielo del Huayna Potosí, la montaña más popular de la Cordillera Real boliviana. De este cerro joven (en aymara) cuyo ascenso no presenta mayores exigencias técnicas se dice que es el seis mil más fácil del mundo. Tiene dos cumbres, siendo la norte la más alta con 6.090 msnm.Sin duda el Nevado Huayna Potosí tiene un atractivo especial no solo para los montañistas sino para todos los que tienen la suerte de admirarlo de cerca. Es majestuosamente blanco, se yergue solitario y goza del prestigio de ser un seismil cuyo ascenso es relativamente fácil. Toda la zona que lo rodea, especialmente su vertiente occidental concentra numerosas lagunas de altura quietas como espejos, a veces congeladas pero siempre situadas dentro del entorno impresionante de la Cordillera Real boliviana. Desde la laguna Khotia hacia la Surakhota y a la Ajwani, donde se encuentran grandes bandadas de patos, cada una es un regalo a la vista en la atmósfera diáfana de las alturas andinas que resalta los colores naturales. El sin igual Macizo Condoriri se acerca día a día impresionando al observador con su belleza elogiada por todos los montañistas y la helada laguna Chiakhota, a 4.880 msnm, es un paraje que impone admiración. Después vendrá el esfuerzo de sobrepasar el paso Jallaiko, sobre los 5.000 msnm, para descender a un valle acogedor y trepar otro paso, circunvalar más lagunas andinas mientras de lejos vigila el Huayna Potosí que propone al excursionista continuar la aventura y gozar al amanecer de una vista amplia sobre La Paz. Los montañistas de todo el mundo elogian el Macizo Condoriri, parte notable de la afamada Cordillera Real boliviana, debido a su singular belleza y semejanza con los Himalaya. El Nevado Condoriri (5648 msnm), la montaña principal, posee tres cumbres que semejan la cabeza y las alas de un cóndor, el símbolo de Los Andes. Forman el macizo además otras catorce cimas cinco mil, entre ellos el Pequeño Alpamayo. En una excursión de cinco días exploraremos este Macizo conociendo sus vertientes y todo el conjunto de lagunas de altura que le dan realce. El Pequeño Alpamayo es un hermoso monte de 5.410 m. que tiene este nombre por su semejanza con una de las caras del gran Alpamayo. Es apenas visible desde el campamento base en la laguna Chiar Khota, oculto por el cerro Tarija un poco más bajo que obligadamente se debe ascender para llegar al Pequeño Alpamayo. Un agudo filo conduce a la cumbre y la vertiente oriental cae abruptamente a las yungas selváticas de la amazonia boliviana en contraste con los 800 m con que se alza en su lado oeste sobre el altiplano, que es la mejor ruta. La excursión andina iniciada hace dos semanas tendrá un final diferente. Un descenso de dos mil metros de altitud en bicicleta desde el pintoresco pueblito de Sorata, al pie del macizo Illampu, hasta la ciudad aurífera de Mapiri a orillas del río, 50 km más abajo por difíciles caminos de montaña. Y a continuación, un viaje de horas en canoa por el río Mapiri y después por el gran río Beni nos llevará al puerto de Rurrenabaque en pleno territorio de las yungas amazónicas, ¡En cuatro días desde las cumbres nevadas a la selva en el corazón de Bolivia!